LOS MISERABLES.
Por Daniel M Forte.
05/04/15
En un punto, siento respeto por los hijos de puta, por
aquellos buenos hijos de puta que tienen el coraje de mostrarse como son. Son
genuinos y no les importa la opinión de los otros; son seguros y estables y constituyen
tal vez el sector mas inofensivo de entre los hijos de puta, porque son
detectables a kilómetros, son, como un enemigo uniformado con el que las reglas
están claras y eso, sin duda es respetable.
Pero están los otros, los que lo son en esencia y su
cobardía, el miedo a no ser aceptados los hace camuflarse con el disfraz de
buenas personas, por eso son inseguros, por eso son inestables; andan en
constante alerta para que su verdadero ser no los desenmascare.
Estas personas, miserables personas, solo desnudan el
rostro en situaciones extremas, porque cuando las papas queman las máscaras
estallan y entonces, su hijadeputez aflora con violencia, con odio y con
angustia, la angustia de verse desnudos
ante los principios de buenas
personas que su cobardía inventó y en tanto cobardes que son, huyen, se
traicionan, lastiman hasta que el egoísmo recompone la situación y les inventa
otra ficticia felicidad.
Son peligrosos, indetectables a simple vista, se ganan la
amistad, se ganan el amor para después dejar destrozada a su víctima.
Por eso respeto a los hijos de puta…a los buenos,
valientes y leales hijos de puta.
Uh! Menos mal que pertenezco a los primeros!
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